Oscuros: Ángeles y una prota un tanto escurridiza.

"Aquí es cuando las cosas se ponen difíciles"

La historia de Daniel y Luce, dos almas predestinadas a encontrarse y condenadas a perderse... Helstone, Inglaterra, 1854. Es noche cerrada y dos jóvenes conversan en una remota casa de campo. Se sienten irresistiblemente atraídos el uno por el otro, pero él insiste en que no pueden estar juntos. Ella obvia sus advertencias y se acerca a él, con paso lento y desafiante. Cuando se besan, una furiosa llamarada lo inunda todo.


Si dejamos a un lado el triángulo amoroso y que la chica está coladita por cierto señorito que pasa de ella, la historia promete mucho.

No he leído muchos libros de ángeles, aunque es el boom que ahora recorre las secciones juveniles de las librerías, pero comparando esta historia con todas las demás, sean ángeles, vampiros o pitufos azules, me ha parecido bastante original. No os contaré nada de la trama, yo me lo leí sin saber nada más que la sinopsis y opiniones tan diferentes que no sabía si hablaban del mismo libro (para gustos... libros), y lo he disfrutado.

Un libro refrescante por una parte y un poco típico por otra, con un final demasiado frustrante, la verdad. Muertes, ángeles, amores, un cementerio y personajes que no son lo que parecen.

Cuando pienso en un libro siempre lo asocio a un color, este sería negro. Todo ocurre en un reformatorio y el cementerio que hay en él, aunque hay escenas en las que todo es de colores brilantes, yo me quedo con las oscuras, donde transcurre la acción, donde los secretos se esconden entre las sombras.

Cuidado con los buenos, pueden ser malos; y los malos...puede que no lo sean tanto.